La relación mente-cerebro:
Hacia una psicología del siglo XXI
Esta obra, relativamente reciente, Irreducible Mind –Toward a Psychology of the 21st Century (2007 la primera edición) es un encomiable esfuerzo por abrir la investigación científica a campos generalmente identificados con la parapsicología o la espiritualidad. Toda la obra es un grandioso homenaje a F.W.H. Myers, ese genio de la investigación psíquica rigurosa, aunque su obra pertenezca a finales del siglo XIX y comienzos del XX. Junto a él otro nombre brilla como hilo conductor del modelo de ciencia psicológica aquí propugnado: William James, sobre todo, aunque no solo, el W. James de Las variedades de la experiencia religiosa (1902), especialmente en aquellos aspectos en los que acepta y lleva adelante la obra de Myers, que culminaría con su magna obra Human Personality and Its Survival of Bodily Death (1903).
Edward F, Kelly y Emily Williams Kelly llevan el peso de la obra, pero hay que destacar a los cuatro colaboradores que a ella contribuyen, en mayor o menor medida, entre los que se cuentan Michael Grosso y Bruce Greyson. Son importantes los temas tratados: la neurociencia cognitiva dominante, el problema de la relación entre el cerebro y la mente, fenómenos psico-fisiológicos destacables, los automatismos de distintos tipos, las experiencias cercanas a la muerte, la naturaleza del genio, la experiencia mística, etc. Pero lo que hace que este libro sea de lectura obligatoria para los constructores de puentes entre ciencia y espiritualidad no son tanto los temas como la metodología y el enfoque utilizados. El rigor científico y la decisión de permanecer en el campo de lo empírico (en el sentido amplio que Myers y James nos enseñaron), la llamada a la constante investigación experimental siempre que sea posible, pero con la apertura mental que no se conforma con los presupuestos, los postulados y los apriorismos de un cientificismo estrecho, reduccionista, que insiste en reducir la mente, e incluso la conciencia, a su soporte cerebral hacen de esta obra una valiosa aportación, que realmente sienta las bases de “una psicología para el siglo XXI”.
Y en esta propuesta, la teoría general de la psique ofrecida por Myers, con la importancia concedida al Yo subliminal, que abarcaría la totalidad de la psique, mucho más amplia, obviamente, que el superficial ego supraliminal, se presenta como telón de fondo de esta meticulosa y amplia investigación. Por otra parte, en lo que respecta a la relación mente-cerebro, se desarrolla la importancia de la llamada “teoría de la transmisión” o “teoría del filtro” (defendida tanto por Myers como por James, y hoy en día frecuente en presentaciones espirituales y esotéricos de distinto cuño), según la cual el cerebro no produce la conciencia, la mente, los pensamientos, sino que los transmite, haciendo de filtro que reduce la naturaleza original de estos últimos, perteneciente a otro plano, a otro orden de la realidad.
Repito, recomendable tanto para materialistas como para espiritualistas, para escépticos (aunque sigan dudando de la propuesta aquí presentada) tanto como para esotéricos (aunque sigan creyendo que todo eso ya lo sabían ellos y poco importa que la ciencia llegue a demostrarlo).